El proyecto del Heroico Colegio Militar es una obra que dentro del imaginario se percibe como un conjunto con una sensación de imponencia y misterio. A través de la experiencia de visitarlo, la escala y magnitud del proyecto de Agustín Hernández revelaron ser aún más imponentes y majestuosos de lo que imaginaba con una atmósfera especial y mística atribuible al proyecto y por otro lado a la temática militar y al símbolo de poder que representan las fuerzas armadas.
El Colegio es un conjunto escultórico. Una pequeña ciudad dentro de la Ciudad en donde emergen osadas estructuras de distintas geometrías que dialogan entre sí. Cada edificio participa en el conjunto sin perder su individualidad. Cohabitan múltiples elementos que se integran en una unidad arquitectónica de carácter monumental. Y como fondo de los volúmenes, los cerros y el paisaje, haciendo del patio de maniobras una especie de anfiteatro rodeado de montañas, un verdadero escenario.
Agustín Hernández fue un arquitecto atrevido con lo moderno, pero respetuoso al rescatar las tradiciones y saberes del ayer. Su obra es un cruce de la cultura ancestral con la tecnología. Taludes, grecas, símbolos prehispánicos, geometría pura, plazas, plataformas, escalinatas, rampas, gradas, edificios, todos cobran nueva vida en concreto, acero, aluminio y vidrio.
Agustín Hernández nos recuerda que somos herederos de dos culturas con diferentes concepciones del espacio, pero que hoy son una sola, y con ella crea un puente que define rasgos de nuestra identidad cultural hacia el mundo. Su arquitectura está conectada con la gran tradición plástica mexicana. Proyecta elementos que expresan nuestro país, sin dejar de ser universal.
Las imágenes que presento en esta intervención fotográfica buscan ir más allá de documentar un edificio, buscan generar un punto de reflexión entre el usuario y el contexto, entre la arquitectura y el uso para el que fue creada, entre la escala y el sentido de colectividad que representan las fuerzas armadas, entre la disciplina militar y la arquitectura simbólica del conjunto, entre los rasgos más antiguos de las culturas prehispánicas y los elementos de diseño arquitectónico contemporáneos.